«En el gobierno Mariano Baptista, se comisiona el año 1893 a Don Vicente Ballivián, sentar soberanía organizando los servicios administrativos de la Delegación Nacional en tierras lejanas.
El 3 de febrero 1894 se funda oficialmente la Villa de Riberalta firmando el acta de fundación como primer Delegado el Dr. Lisímaco Gutiérrez y como sub-delegado Don Vicente Ballivián y otros meritorios ciudadanos fueron testigos de este histórico documento entre los cuales podemos mencionar a Don Justo de Villegas, el Dr. José Gutiérrez Guerra que luego fue Presidente de la República, Don Rosendo Rojas, el Dr. y General Ismael Montes también Presidente de la República, Román Paz y otros, los cuales llegaron con el tiempo a asumir funciones de la más alta jerarquía del Estado.
La historia de este pueblo se nutre de leyendas y osadías de lo inédito del portento de selvas y ríos, de la intrepidez del hombre del oriente y del hombre del collao, así nace Riberalta la de los cuatro nombres: Barranca Colorada, La Cruz, Ribera Alta, Riberalta y un quinto que le dan los poetas soñadores, la Bella Orquídea del Manutat. Su flora y fauna es riquísima la explotación de los productos tradicionales como la goma elástica, castaña, la madera y el oro aluvional, los cultivos agrícolas son florecientes y el movimiento fluvial es muy activo.
Riberalta ganó renombre y prestigio por su actividad artística y cultural contando con escritores, poetas y compositores reconocidos a nivel nacional e internacional tales como Pedro Simosi, Kawamura, Hugo Villanueva Rada, Félix Satori Román, Rubén Darío Parada, Saise Tumo López, Ismael Saucedo Núñez del Prado, Luis Saucedo Sánchez y muchos otros.
En el campo deportivo desde la década de los años 70 Riberalta viene aportando con valores del fútbol profesional que defendieron la casaca nacional tales como Miguel Antelo, Limber Cabrera, Néstor Vaca, Miguel Angel Noro y el inolvidable Miguel Angel Rimba que contribuyeron en la titánica hazaña de clasificar a Bolivia al campeonato mundial de fútbol en Estados Unidos.
En lo relacionado en las vías de comunicación, Riberalta es el centro de la planificación caminera del norte con asiento de una delegación del servicio nacional de caminos, se mantiene la mejor carretera ripiada de todo el Beni y Pando como es la que une con Guayaramerín la otra carretera en continuo mejoramiento es la que va hacia Santa Rosa, Reyes, Rurrenabaque y La Paz obra pensada y promovida por el riberalteño en su afán de integrarse a la economía del país, esto tiene su más rotundo triunfo cuando la Capital Riberalteña en un alarde de autosuficiencia rompe con los mitos y complejos y llega a unir la Capital Amazónica con la Capital Andina.
Fue en 1986 que todo el país fue testigo de semejante audacia y pujanza propia de los gigantes de la etapa cauchera, fue la dirigencia política administrativa de la Nación y de la ciudad de La Paz y el calor humano de la heroica como sentimental colectividad de las cien veces ínclito paceña quienes se encargaron de recibir a los riberalteños que por primera vez ostentaban su divisa de Amazónicos.
Las líneas aéreas tradicionales nacionales pioneras de la integración aérea están siendo coadyuvadas actualmente con nuevos impulsos por esa vía. Así es Riberalta la bella orquídea del manutata del pueblo de trabajo y progreso un pueblo de futuro, un pueblo bendecido por la gracia de Dios.»